Hasta siempre...

En estos últimos meses, confieso que sospeché entre líneas la llegada inminente de este día, intente postergarlo, me regalé algo de tiempo y les robé algo del suyo a la vez... creo que en el fondo, no quería enfrentar la triste realidad de tener que despedirme de este espacio que me ha regalado tantas alegrías y buenos momentos. Gracias a Green Life, he encontrado personas maravillosas, que me han acompañado en mil y un aventuras, hemos tomado tantos aviones juntos, perdido maletas y conexiones, disfrutado de comidas extrañas y bebidas exóticas...

He podido escuchar la voz de muchos de ustedes al teléfono, y hace un par de meses, logré conocer a mi primer blogger en persona (María Cristina), cabe mencionar que si Dios quiere, estaré con muchos de ustedes a mediados del mes de junio, durante mi visita a Monterrey, lo cual me llena de inmensa alegría...

Podría tomar la decisión de no cerrar el blog, y escribir cuando el tiempo lo permita, lo cierto es que extraño a morir este sonido del teclado, cuando se me llena de ideas la mente y no pienso en otra cosa que el contenido del post, la foto y hasta la canción que lo acompañará, pero no sería correcto aparecer cada muerte de obispo, y pretender que el mundo siga expectante de mis acontecimientos, mientras yo no tengo tiempo de regalarles al menos una corta visita de vez en mil...y ustedes se merecen más que eso...

Prefiero que aunque duela, se termine así, con todos ustedes aún recordándome, y con todos mis sueños dentro de la siguiente maleta... no tienen idea de lo difícil que me resulta escribir esto, amaré siempre los verdes rincones de este mi hogar virtual, dejar plasmado en el todo el cariño incondicional que le profeso a Green Day y mi abierto amor frustrado por Billie Joe Armstrong, la enfermisa atracción hacia Jack Sparrow, lo mucho que extraño a mi querido Monterrey, lo feliz de haberme reencontrado con mi padre y mis visitas a Nicaragua...

Les dejo aquí las historias que he tejido en torno a cierto Guitarrista, al par de Cosas (1 y 2) y al Ciclista que acompaña mis pasos... mis sueños, que no son pocos, siempre van repletos de ilusión, de buenas intenciones y de un millón de verde esperanza...

Me ha tocado vivir un parte aguas en mi vida, quiero pensar que es para bien, y debo enfocarme en esto con todo el corazón... algún día puede ser que regrese a contarles en que va My Own Green Life... hasta entonces y mientras llega ese día, solo quiero dejar unas cuantas palabras Los Quiero un mundo... Hasta Siempre...