No se como ni cuando...

Nunca pensé que el despedirme ó decidir cerrar el blog fuera a provocar tanta tristeza y sentimientos encontrados, yo no puedo ser tan irresponsable y dejar esto así, después de tantas muestras de cariño que han manifestado en el post anterior. Debo agradecer a todos y cada uno por cada señal, en especial a Santiago y Valentín por sus post, a Diego por su enojo, les pido disculpas, en todo caso yo siempre los he querido felices y les he deseado amor y felicidad en sus vidas, entonces no tiene lógica pensar que sea yo quien les provoque tristeza.

Durante estos dos días leí cada comentario y era como morir en vida, anoche Mi Ciclista me decía: "¿Porqué tienes que ser tan radical?... ¿Porqué todo tiene que ser blanco ó negro contigo?" y me quedé pensando que en verdad siempre he sido así, de palabra, de todo ó nada, y que quizás el compartir mi alma con ustedes rindió frutos, y lo que hubiese sido blanco ó negro desde siempre, hoy puede ser verde, y acepto el error de no reconocerme diferente, que aunque no podré dedicarles todo el tiempo que quisiera, aún tengo mil y un tarugadas en la mente, sumadas a las mil sandeces que me pasan y que... ¡solo a mi me pasan!

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Además ¿A quién voy a contarle que ya tengo pinta de suegra?, que Mi Guitarrista está de mi estatura (1.77 m) que calza lo mismo que Mi Ciclista y que me trae loca de a madres, que Cosa 1 y Cosa 2 no han incendiado el colegio aún y que nos dejaron el ojo en tinta (a nivel familiar) porque resulta que les gusta el football y están en el equipo (juro que no son adoptados), con tanta lágrima hasta olvidé contar que el viernes me fui a ver el concierto de Pxndx mi grupo favorito (en español) y que entre Mi Guitarrista y yo pegamos más brincos que chapulines en sartén... en fin que aún tengo tanto que decirles, que como bien me dijo uno de ustedes por ahí... mis letras y este mundo verde ya no son solo míos, también dijeron... cuando puedas, así que aún no sé como ni cuando, pero... aquí estaré.

Gracias.